10 abril 2010

Esto sí que es estrenar la bici

Hoy hemos hecho la ruta más dura de las que he hecho por Valencia, y puede que la más dura que hay a hecho en mi corta vida como "biciclista".

Y lo más duro de esta ruta, ha sido el suelo.

En efecto, como todos ustedes se están temiendo, me he aplicado mi primera galleta, por culpa de las calas.

Les pongo en situación:

Bétera, 8:45 de la mañana. Vamos por el carril bici que discurre por la carretera, antes de pillar la ruta en la montaña, no llevábamos ni 10 minutos montados en la bici.
El carril bici cruza la carretera, y hay un stop.
Viene una furgoneta, y voy a detenerme.
El tipo me dice que pase, pero yo ya estoy parando, y me he quitado la cala derecha.
Al segundo siguiente, estoy en el suelo, no me ha dado tiempo ni a darme cuenta de que me caía hacia la izquierda, y ni he hecho la intención de quitarme esa cala.

Daños:
- Rodilla izquierda magullada y una pequeña heridita.
- Rodilla derecha magullada contra el cuadro de la bici.
- Tobillo derecho con pequeñas heridas causadas por el plato grande de la bici.
- La bici se ha hecho unos pequeños arañazos en la parte frontal del manillar, en el regulador del freno hidráulico, y en el anclaje de los cambios.
- Mi orgullo, porque no sólo Martín y Manolo se han partido el culo, y luego me iban diciendo todo el rato: "Diego, hay un stop, cuidado no te caigas..." sino que el tipo de la furgoneta se estaba partiendo a mi costa.

Lo que más me duele es la bici... pero no se vayan a creer, que si no sabes dónde están los arañazos, ni siquiera se ven...

Mañana más.

3 comentarios:

Tu padre dijo...

Me caguen la bici y los Stop,mirate bien las heridas, ten cuidado.Un abrazo

Sabrina dijo...

jajaja, me parto...... ve con cuidado. Malditas calas!!

Colines dijo...

¿Preocupado por arañazos en una bici de montaña?, creo que en Suecia te han contagiado alguna neurosis. ¡Un abrazo Diego!